Javier Peñarrubia es CEO de Método Divergentes, centro de psicología y psicopedagogía en Valencia para niños, adolescentes y familias. Están especializados en Altas Capacidades e Inteligencia Emocional. Javier fue consciente hace años de la importancia de la educación y más de la emocional y de cómo es necesaria “otra forma de cole”, como él muy bien explica.
“Yo estudié Arquitectura Técnica. Después de más de 10 años trabajando en el sector, con la crisis, decidí irme a trabajar fuera. Estuve en diferentes países de África y la India, donde vi la importancia de la educación para el desarrollo de un país. Después de 6 años por ahí, decidí volver a España y dejar mi profesión para dedicarme a los niños”, indica Javier.
“Mi amiga y ahora socia Joana, me contó su experiencia como psicóloga infantil y la cantidad de problemas que tenían los niños de Altas capacidades, entre otros. Frustración constante, falta de autoestima, ansiedad,… son problemas cada día más comunes entre los niños. Después de unos meses de darle vueltas, le propuse abrir nuestro propio centro donde poder ayudar a todos los niños a mejorar sus habilidades sociales, creer en sí mismos y desarrollar su creatividad para que puedan llegar a ser lo más felices posibles en su vida adulta”, declara el CEO de Método Divergentes.
El proyecto vio la luz en septiembre de 2019, después de más de 3 años de formación intensa de sus socios. Sus instalaciones, ubicadas en la calle Joaquin Costa 43, en Valencia, requirieron una inversión inicial fuerte, “pero necesaria para la envergadura de la iniciativa. Es importante que el ambiente para los niños sea el adecuado para su mejor tratamiento”, explica Javier.
Así, Peñarrubia nos explica un caso práctico:
“Mario, 8 años. Sus padres dicen que es muy listo. Aprendió a hablar mucho antes que sus compañeros y tiene un vocabulario impropio para su edad. No le gusta nada ir al colegio y sus padres se las ven y desean cada día para llevarlo. Están un poco desesperados porque no saben qué hacer. Mario también tiene una tolerancia a la frustración nula, en cuanto algo no le sale bien monta en cólera con el consiguiente enfado de los padres.
Desde el colegio les dicen que es un niño bastante despistado y molesto en clase, pues no para quieto. Los orientadores creen que podría tratarse de un niño con Déficit de atención e Hiperactividad.
Al llamar a Divergentes y después de unas cuantas preguntas y realizar un test de cribaje, les proponemos evaluar a Mario. Mediante la completa Evaluación Psicopedagógica que hacemos vemos cómo es Mario en estos momentos. Las pruebas nos dicen su creatividad, inteligencia, estado emocional, funciones ejecutivas… A raíz de ahí realizamos el informe con el diagnóstico de Altas Capacidades. Los niños con AC tienen unas necesidades educativas especiales. Hablamos con el Colegio para ayudarles en la intervención en el aula con Mario, así como a los padres en casa.
Ofrecemos trabajar también a nivel grupal sus habilidades sociales y sus capacidades cognitivas. Y a nivel individual su tolerancia a la frustración.
Pasados unos meses, Mario ya no ve el colegio como algo desmotivador, sino todo lo contrario. Le encanta aprender y va entusiasmado. En casa, los berrinches por no hacer algo bien ya no son tan elevados y la convivencia ha mejorado mucho. Los padres han aprendido a estimular a Mario con juegos y actividades que le encantan.
Mario es un niño con características diferentes a los demás, pero igual de feliz al resto”
Con un equipo actual formado por 7 profesionales, el objetivo de Método Divergentes es consolidarse en Valencia como centro de Psicología y ser un referente en Altas Capacidades en toda la provincia. “Además queremos seguir creciendo en la formación a profesores, educadores y orientadores de centros educativos, y crear una plataforma online de cursos para llegar a todos los hispano hablantes”, explica Javier.
